Parte inicial del entrenamiento deportivo
En este artículo daremos a conocer cómo se tendría que realizar la parte inicial de un entrenamiento deportivo. No obstante, antes de ello, hay que conocer cuáles son todas sus partes. Estas son:
1- Parte inicial o calentamiento: de introducción al trabajo del entrenamiento.
2- Parte principal: donde se desarrollan los objetivos y contenidos del entrenamiento.
3- Parte final: donde se readapta el organismo al ritmo normal.
Visto esto, describimos la parte inicial como la serie de actividades en las que el cuerpo se prepara para el esfuerzo superior al normal que se realizará posteriormente.
Se suele empezar con una carrera continua breve de poca intensidad de un par de minutos, donde se empieza a tomar contacto con el terreno y los músculos se desentumecen.
Posteriormente, pasaríamos a una serie de ejercicios de estiramientos estáticos, donde el entrenador no debe estar en el centro de un círculo, pues debe supervisar la correcta realización por el grupo. Para facilitar la labor del míster y recordar todos los músculos, se recomienda seguir un orden de abajo-arriba o de arriba-abajo. En el caso del fútbol, se da preferencia a los músculos del tren inferior. Se debe estirar unos 8-10’’ cada músculo, y se dedicarían unos 3-5 minutos. Entre estos músculos se encuentran, como los más importantes, los gemelos, sóleo, cuádriceps, isquiotibiales, abductores, aductores…
La penúltima fase de esta parte inicial corresponde a la movilidad articular. Se puede realizar de diversas formas, estáticamente o en movimiento, con balón o sin balón. La duración aproximada sería 5 minutos. Por ejemplo, ejercicios de giros de hombros, aperturas de los mismos hacia los lados, arriba y abajo, giro y torsión del tronco, carrera lateral y cruzada, skipping y contra-skipping, lanzamientos hacia fuera, hacia dentro y al frente para abductores, aductores e isquiotibiales…
Por último, se realizaría un trabajo de activación técnico-táctico que dependería en su elección del tipo de entrenamiento que vayamos a hacer posteriormente. Por ejemplo, si hoy entrenamos conservación del balón, podremos hacer como activación una posesión con los pies. Si entrenamos velocidad, podemos hacer un juego de velocidad como el pilla-pilla. Existe infinidad de juegos de activación, como pueden ser: el cortahílos, la cadeneta, el balón corredor, el comecocos, el pañuelo…
Fiebre Albertini 